Matar una hormiga con cañón. Éste ha sido el ejemplo que esta tarde han puesto en la clase de MKT Estratégico para que nos quedara bien claro cuál es la diferencia entre eficiencia y eficacia... Creo que aún continúo sorprendida, no por el ejemplo en sí -que es bastante bueno y digno de recordar-, sino por las caras de interrogante que han aparecido en el aula cuando Bárbara ha hecho la pregunta de que cuál era la diferencia entre ambos términos.
Hoy tengo que volver a echar mano del refranero español para hacer uso míticas frases: "Cada palo que aguante su vela", "A cada cerdo le llega su San Benito" y "Siembra buenas obras y cogerás frutos de sobra"... No hace falta explicar más, está bien claro.
Tras una conversación con una gran amiga, hoy he tenido que dedicar un breve espacio de mi tiempo a saber qué es lo que quiero respecto a un tema concreto. La respuesta ha sido la esperada, tal vez me pueda equivocar, pero de momento: sin prisa, pero sin pausa...
1 comentario:
A veces me equivoco porque soy humana, es lo normal, todos lo hacemos...pienso que antes de tomar una decisión es bueno meditarla, y sacar conclusiones, estas no siempre serán acertadas, pero al menos nos mostrarán una parte de realidad que a simple vista no somos capaces de ver.
Respecto a tu reflexión sobre siembra y frutos añado: Karma y Darma, lo que haces hoy, bueno o malo, recibirás mañana.
Fdo: La niña que intenta cada día subir al lado bueno de la balanza.
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