Ya solamente me quedan cuatro días para apartame del asfalto rutinario y retirarme a descansar y disfrutar de las 744 horas que voy a tener para dedicarme única y exclusivamente a mi y a mi entorno más próximo. Un mes completito para apartame de todo y desconectar. El viernes comenzaré a gozar de mis paseos por la orilla de la playa, mis larga tarde tirada sobre la arena, leyendo y disfrutando de la brisa y el sonido del mar...
El viernes comenzaré a saborear cada segundo, canda instante sin tener que depender de teléfonos, correos, horarios... Nada, nada absolutamente marcará mi ritmo, el único ritmo que seguiré será el de mi corazón y el de mis sentimiento que serán quienes me digan lo que tengo que hacer en cada momento.
Cuatro días para apartame de todo, para dedicarme a hacer cosas de las que tanto me gusta disfrutar...
Durante todos estos días, esta Burbuja Escondida quedará relegada a un tercer plano, pero con total seguridad no me olvidaré. Evidentemente, este rincón escondido, esta puerta a mi interior podrá seguirá esperando tranquilamente mi retorno porque volveré.
No sé cuándo volveré por eso me despido ya con un hasta pronto y una imagen que estas vacaciones veré en más de una ocasión...