jueves, 29 de abril de 2010

Fondo en blanco

Un fondo en blanco, recostada sobre la mesa, con la mirada fija en ese fondo y reviviendo rápidamente un sinfín de historias que le gustaría contar... Vuelve a la realidad con un leve movimiento que le hace prestar atención a ese fondo blanco que le pide con ansiedad: ¡Escribe, que no deje pasar lo que hay en tú interior. Hoy es el día!

Pero no se decide. No sabe por dónde empezar, tampoco sabe si realmente le interesa contar algo. La presión de su ego le obliga a que sea ella sola la que disfrute de todo lo que la vida le ha ido regalando de un tiempo a esta parte. Le exige seguir teniendo ese fondo en blanco.

Se ha vuelto ambiciosa, desconfiada y hasta un tanto retorcida. No quiere compartir su interior con nadie, no quiere que le vuelvan a robar lo que un día desapareció sin apenas darse cuenta y que ahora, con tanto esfuerzo, ha logrado recurar nuevamente.

¿Pasará?

No se sabe...

Fija un poco la mirada y observa que ese fondo en blanco ha adquirido un pequeño matiz... Es suave, casi imperceptible a resto, pero ella lo está viendo...

¿Resultará ser una señal?

No se sabe...

Solamente el tiempo determinará si ese fondo tornará a un color vivo o apagado, a varios o a la neutralidad presente...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Querida Burbuja,
Quizá, y digo quizá, sea el momento de compartir tu interior, de ganar esa feroz y audaz batalla a tu ego, el cual, quizá y digo quizá, no te deje ver que hoy, existe algo o alguien por lo que merece la pena contar algo, ganar esa batalla.
Quizá y digo quizá, ese algo o alguien, busque el espacio necesario para intentar devolverte lo que un día te robaron sin apenas darte cuenta.
Quizá y digo quizá, sea el momento de abrir tu interior y volver a ser esa persona que quizá, esa desconfianza no te deje ser.
Quizá.

@AbellanMurcia dijo...

Quizá..., pero mi batalla está ganada desde hace tiempo. Ahora le toca el momento a mi ego, para el único que hay espacio en este momento, así que ese "algo o alguien" tendrá que esperar o encauzarse en otro camino que le resulte más fácil.
Forzar máquinas es querer modificar algo que debe de ser, yo me niego a forzar nada, así que dejemos que el agua fluya...